En la legislación chilena la “Presunción
de Inocencia” es un principio jurídico que establece como regla general la inocencia
de una persona, y será sólo el proceso judicial o juicio el que demuestre su
culpabilidad, así la Justicia aplique la pena que corresponda según la Ley
chilena. La contracara del principio de presunción de inocencia, son a través
de las “Medidas Precautorias”, como lo es la prisión preventiva.
Hechas estas observaciones, es
pertinente señalar que en el Sistema Financiero chileno, dichas instituciones,
llámense Bancos, División de Consumo o Tarjetas del retail, actúan bajo el
principio de “Presunción de cliente riesgoso”, el que justifica el cobro de
tasas de interés superiores a lo normal, argumentando para ello un principio
lógico y teóricamente demostrado, pero que funciona de forma unilateral, que es:
“a mayor riesgo de crédito del cliente , mayor es la tasa de interés que debe
pagar, para que el banco esté dispuesto a asumir dicho riesgo”.
Detrás de este principio, se
encuentran las siguientes reglas de análisis de riesgo crédito, que son
ampliamente aplicadas por el sector financiero chileno:
1ª fuente de pago: Son los ingresos
mensuales, con los que el cliente deberá cancelar la cuota.
2ª fuente de pago: Es el patrimonio,
que se analiza pensando en que si el cliente perdiera sus ingresos, debiera
liquidar su patrimonio para pagar, es decir, vender auto, muebles, etc.
3ª fuente de pago: Son las
garantías o todo lo que le sea embargable, si no puede seguir pagando, es
decir, una vez liquidado todo su patrimonio, el banco lo embargará.
Entendiendo que estas reglas
de análisis parecen lógicas y jerarquizadas, de ellas surgen inquietudes desde
el punto de vista del cliente. Si pide un crédito y le es aprobado y otorgado,
pero considerándolo en el origen un cliente riesgoso, por poseer ingresos
promedios normales, y un bajo patrimonio, se le asignará un pagaré con una tasa
de interés muy alta, la cual reflejará la sobreprima por riesgo que se aplica
por ser más riesgoso de lo normal. Cumplido el plazo del crédito y canceladas
todas las cuotas en tiempo y forma, y demostrado al banco que no es un cliente
riesgoso, ¿Le devuelven el dinero cobrado como sobreprima por riesgo, o mejor
dicho por haber presumido que era un cliente riesgoso en el origen?
Si el cliente no paga le
quitan todo a través de tribunales y como respuesta el cliente, ¿Les puede
embargar una sucursal? si no le devuelven la sobreprima por riesgo que le cobraron
arbitrariamente. La respuesta siempre será NO.
Lo que hace más insostenible
aún este tema, no es saber que el negocio es favorable para las instituciones
financieras y que muchos clientes lo aceptan cancelando sus altas cuotas a
costa de estrés, sobrecarga de trabajo y despreocupación familiar; sino más bien
saber que el dinero que prestan las instituciones financieras no sale del
bolsillo del dueño del banco, sino que de instituciones nacionales, que son de
todos los chilenos, sin distinción de clases sociales.
Oscar Rojas Carrasco, Ph.D.
Director de Postgrado
Escuela Internacional de Negocios Europea
EINE.